El diálogo y compartir entre generaciones genera riqueza para ambas partes. A unos les brinda sabiduría, a los otros, les enriquece con la experiencia.
Escuchar, ser escuchado y compartir ciertos momentos del día son las actividades que desarrollan los jóvenes que asisten semanalmente a Calucé para acompañar el proceso de envejecimiento sano que brindamos a nuestros huéspedes.