El arte es como finalidad estética es una virtud netamente humana. Es la expresión que nos permite ser partícipes del universo creador y fomenta en nosotros un espíritu liberador que se satisface las necesidades más abstractas que podemos tener.
La pintura, por ejemplo, es una expresión artística que une el sentido de la vista y el tacto, así como la espacialidad y el sentido de orientación. Es una actividad que además, eleva el sentido del querer propio de cada huésped.